Matías Rivera: Siempre he tenido el llamado a hacer cosas nuevas
Emprendedor y creador de empresas y organizaciones, desde los inicios de su carrera ha desarrollado soluciones innovadoras a partir de un buen olfato que identifica necesidades y en distintos ámbitos. Sobre emprender en Chile y Estados Unidos, sus desafíos y motivaciones, nos cuenta en la siguiente entrevista el recién elegido asesor del directorio de Betterplan.
Toda tu vida has estado ligado al emprendimiento. ¿Naciste o te hiciste emprendedor?
Empecé a descubrir el mundo del emprendimiento cuando estaba en la universidad. Tuve la oportunidad de pasar un semestre en Harvard College y cuando estaba allá un profesor chileno de MIT, Arnoldo Hax, me presentó el concurso de emprendimiento de MIT, el MIT 100K, y me desafió a replicarlo, creando un concurso de emprendimiento en la Universidad Católica. Con un grupo de alumnos lo lanzamos con el nombre Jump UC, el cual hoy ha crecido a ser Jump Chile y se ha convertido en el concurso de emprendimiento universitario más grande de América Latina. Esa experiencia me metió de lleno en el mundo del emprendimiento y las startups. Luego me uní al área de innovación del Ministerio de Economía de Chile, donde entre muchas otras cosas, fui parte del equipo fundador de Startup Chile, que fue una experiencia increíble.
¿Cuándo supiste que querías dedicarte a algo propio?
Siempre he tenido el llamado a hacer cosas nuevas. No veo el emprendimiento desde el tener algo propio, sino desde el identificar problemas y construir un equipo y una organización que permita abordar ese problema a través de una solución innovadora que agregue valor, ya sea armando un programa para impulsar el emprendimiento a nivel país o creando una fundación para reforestar parques nacionales afectados por incendios. Siempre el hilo conductor ha estado en el problema en la oportunidad de crear algo nuevo, no necesariamente en el sentimiento de propiedad.
¿Cuáles han sido tus motivaciones al emprender?
Mi pasión es resolver problemas. Me motiva mucho identificar una necesidad. Tener una idea creativa de cómo puedo ayudar a abordarla, entregar una solución, luego ejecutar esa idea y construir una organización desde ahí.
¿Cuáles han sido los principales desafíos que te has encontrado en el camino desde que comenzaste a emprender?
He emprendido en muchos ámbitos distintos: creando una fundación, lanzando programas universitarios y gubernamentales, desarrollando empresas de impacto social y ahora último creando un emprendimiento tecnológico for-profit. Cada proyecto ha tenido desafíos propios y particulares, pero quizás el más recurrente ha sido el desafío de ir de cero a uno, de no tener algo a tener algo. Este es un proceso complejo y que requiere multi-tasking, perseverancia y mucho trabajo. Cuando se está empezando algo nuevo hay que hacer muchas cosas al mismo tiempo. Balancearlas todas y lograr avanzar es quizás el mayor desafío, así como también armar equipo, obtener financiamiento, desarrollar el producto o servicio, marketearlo y hacerlo llegar a más personas, etc.
¿Cómo ha sido la experiencia de emprender en Estados Unidos?
Estados Unidos es un mercado inmenso y lleno de oportunidades, pero también muy competitivo. Es jugar en las grandes ligas, con lo bueno y lo malo. Para mí ha sido una experiencia de grandes aprendizajes, además de mucho crecimiento profesional y personal.
¿Cuáles son las principales diferencias de emprender en EEUU y hacerlo en Chile?
A medida que el mundo se globaliza más y más, y hoy con la pandemia trabajando virtualmente, creo que se siguen derribando las barreras geográficas tradicionales. Se puede emprender desde EEUU para prestar un servicio en América Latina y Chile, y se puede emprender desde Chile para prestar un servicio en EEUU. Creo que la variable clave no es dónde uno está ubicado, sino qué mercado está abordando.
¿Cómo se originó Fanatiz?
Estaba estudiando mi MBA en la Universidad de Stanford y pensando en algo nuevo para construir. Ahí vi cómo muchos de mis amigos internacionales -en particular latinoamericanos- estaban desesperados intentando ver los deportes de sus países de origen, ya que en muchos casos simplemente no existían alternativas legales para verlos. La única opción eran servicios piratas, que no sólo eran ilegales, sino que ofrecían una muy mala experiencia al consumidor, con señales inestables, publicidades y virus. Fanatiz nació de la idea de abordar ese problema y ofrecer una mejor solución.
¿Dónde te ves profesionalmente en 20 años más?
Nunca he podido predecir mi futuro. Como dijo Steve Jobs en su famoso discurso en la universidad de Stanford, los puntos sólo se conectan mirando hacia atrás. El hilo conductor, eso sí, siempre ha estado en torno a construir organizaciones para abordar problemas y creo que seguiré en eso toda mi vida.
¿Qué le dirías a alguien que quiere emprender, pero aún no se atreve a dar el paso?
Piensa en el problema que estás buscando resolver, el usuario o la usuaria a quién quieres brindarle un servicio y busca formas de validar las hipótesis detrás de tu idea de negocio. Entrevista a potenciales clientes, entiende sus necesidades, e intenta hacer un MVP (minimum viable product) que te permita validar tus ideas rápido y barato. Esto te permitirá gestionar un poco el riesgo, pero eventualmente no queda otra que tirarse de lleno a construir lo que quieras armar. Sobre todo si estás temprano en tu carrera y tu costo de oportunidad no es muy alto, es el mejor momento para probar – probablemente te arrepentirás más de no haberlo intentado que de haber dado la oportunidad a emprender. ¡Salta!